El espectacular incremento de los precios de los alimentos en el mundo entero provocará el mayor drama humanitario del siglo XXI. La elevación en más de un 80% de alimentos tan básicos como el arroz, la patata o el trigo hará que muchos millones de seres humanos cuya dieta básica depende de estos alimentos, no puedan adquirirlos en cantidades suficientes poniendo en serio peligro de supervivencia a millones de seres humanos.
A este incremento de precios se le han buscado miles de razones tales como el incremento de la demanda de China, las malas cosechas, el cambio climatico, el incremento poblacional desmesurado, etc... que aún siendo razones importantes, no justifican este incremento tan brutal. Todos sabemos porque están subiendo tanto los precios: por la especulación.
Especulacion impiadosa que no se conforma ya con dejar a millones de personas sin un hogar digno en el primer mundo sino que ahora mata en el tercer mundo. Sí, digo mata porque este negocio, donde unos pocos acaparan está matando de hambre a millones de personas que no tienen suficientes recursos para hacer frente a la subida de su sustento. Personas que sufren interminables jornadas de trabajo para recibir un salario de miseria que antes le permitían alimentar a su prole y que ahora no da ni para alimentarse ni a si mismos.
A donde llega la crueldad de este sistema capitalista especulativo que permite que el dinero viaje allá donde le plazca arrasando débiles economías, dejando sin los recursos más básicos a gentes pobres del primer al tercer mundo.
Regulen, castiguen la especulación, pero no permitan poderosos gobernantes, que esta campe a sus anchas por el mundo. No se escuden en la globalización para permitir estos genocidios silenciosos. No dejen que sea ésta la que regule la población mundial asesinando al eslabon más débil de la cadena.
Paren esta locura especulativa en la que se está convirtiendo el mundo. No seamos cómplices de este crimen.
Paremos la especulación.
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