Dejando al margen la locura de las bolsas que no paran de batir records positivos o negativos, la crisis financiera está poniendo en evidencia la enorme fragilidad del sistema capitalista liberal. Tal es así que en plena crisis ya nadie hace ascos a la intervención e incluso los gobiernos tradicionalmente más liberales del mundo están llevando a cabo las mayores intervenciones, (probablemente porque fue donde se acumularon mayores problemas).
Pero hay que dejar bien clara una cosa, esto no se hace "por el bien común" o "para salvarnos a todos" o "como el mal menor", tal y como nos lo están vendiendo gobiernos y grandes economistas como un mantra que no para de repetirse. Esto solo se hace para salvar el sistema.
Pero salvar el sistema no implica salvarnos a todos. No se equivoquen, el capitalismo no es el mejor de los sistemas posibles y a los hechos me remito. Y ni siquiera todas las formas de capitalismo son iguales. Existen formas capitalistas salvajes que propugnan la desregulacion (neoliberalismo) y capitalismo regulado o intervencionista que propugnan los keynesianos.
Pero el caso es que ante la magnitud del problema, los mandatarios del mundo están reaccionando como tratando de salvar el barco que se hunde echando agua con cubetas al mar, en vez de arreglar el barco.
En definitiva, da la impresión de que les preocupa más salvar el propio capitalismo que solucionar los graves problemas que presenta la economía y para muestra lo que están haciendo ahora.
Los dirigentes están poniendo dinero para salvar a la banca. Con más o menos condiciones pero son prácticamente cheques en blanco para tapar las quiebras escondidas del sistema, aquellas que no nos quieren contar que no causamos nosotros pero que debemos pagar entre todos.
Y digo yo, ¿no sería mejor arreglar el problema de fondo que dedicarse a taponar las fugas? El problema no se generó arriba. Cierto es que los gobiernos tienen la culpa de no haber regulado mejor y cierto es que los banqueros no tuvieron escrupulos a la hora de especular pero el problema lo tiene el ciudadano medio, aquel al que se le concedió hipotecas aún a sabiendas de que si subían los tipos de interés no podrían pagarlas.
¿Por qué entonces se deben ayudar a los bancos y no a aquellos que están gravemente asfixiados con una hipoteca que lo más probable es que nunca llegarán a pagar? Evidentemente plantea un problema moral, ¿debemos ayudar a aquellos que se endeudaron demasiado? ¿No sería premiar la mala praxis?
Es cierto que esto sería premiar la mala praxis pero también es cierto que con los planes gubernamentales que se están oyendo estamos premiando la mala praxis de los bancos. Pero también es cierto que esas hipotecas nunca debieron llegar a ser concedidas. Por tanto la negligencia no es tanto de las personas que accedieron a ellas sino de aquellos que se las concedieron.
Por ello y aunque duela una solucion en la que podemos estar de acuerdo gobiernos y yo es en que hay que hacerse cargo de esas hipotecas. ¿Pero a cambio de nada? Ni mucho menos.
Como decía anteriormente, el problema se generó abajo y debiera ser arreglado desde abajo. ¿Como? Nacionalizando las hipotecas impagadas. Aquellas cuyos deudores no puedan hacerse cargo definitivamente de la hipoteca por haber incurrido en quiebra personal. La contrapartida podría estar en aquello que causó el problema, la vivienda.
El gobierno debería hacerse cargo también de aquellas viviendas hipotecadas convirtiéndolas en patrimonio del Estado y que revierta en los ciudadanos. Es decir, con estas viviendas confiscadas se podrían poner en régimen de protección estatal tal y como tenemos en España con las VPO de alquiler. Es decir, el estado se hace cargo de la hipoteca y a cambio se queda con la casa que alquila o bien al que quebró o bien a otra persona.
Esta especie de nacionalización de la vivienda podría servir a la vez como regulador del precio de esta que evitaría que el precio subiera demasiado en tiempos de expansión y que bajara demasiado en tiempos de crisis. ¿Por qué? Porque estamos poniendo en manos del Estado una de las armas que tanto defendía Keynes en sus artículos de economía: el stock regulador del mercado. El Estado compra cuando todo el mundo vende y el Estado vende cuando todo el mundo compra. Así se evitan esas fuertes fluctuaciones que la especulación causa en los precios.
¿Donde quedan los bancos en todo esto? Por un lado los bancos conseguirían librarse de esas famosas hipotecas tóxicas y recibirían liquidez del banco en su justa medida. Es decir, solo se pagaría a los bancos por aquellas hipotecas impagadas sin dar necesariamente un cheque en blanco. Pero volvemos quizá a lo mismo, premiamos la mala práxis de los bancos. Pero con la diferencia de que en este caso no es el banco sino el Estado el que se queda con la propiedad de la vivienda en caso de quebranto.
Pero no solo puede quedarse en eso, se puede obligar a la disolucion del banco o bancos causantes, puede encarcelarse a los responsables puede sancionarse economicamente a los directivos, etc...
Y esto solo son medidas para para parchear el sistema. El grave problema del capitalismo sigue presente: la especulación. Especulación que provoca violentas subidas o bajadas en las bolsas, las viviendas, los alimentos, el petroleo, etc... y que no se castiga, no se regula, no se evita.
Hay que cambiar el sistema de fondo si no queremos repetir los problemas del pasado. Hay que reformar el capitalismo y si es necesario, cambiarlo por un sistema mejor.
En definitiva, no podemos dejar que todo siga como hasta ahora.
P.D. Disculpen la larga ausencia pero los problemas de salud no inspiran precisamente a escribir artículos.
Un saludo a todos nuestros lectores
Estoy de acuerdo.
ResponderEliminarEn Suiza ya se hizo. La gente normal le alquila la vivienda al Estado. Ahora el mercado de la vivienda libre ha quedado sólo para las grandes empresas y gente con pasta.
Mi tío tenía un piso para él y su novia y cuando nacieron sus dos hijos solicitó uno más grande. Se lo concedieron y ahora le retienen un poco más pero está en la misma urbanización.
Es más práctico y te da más flexibilidad a tu vida. Aquí cuando terminas de pagar la hipoteca te das cuenta de que tus necesidades han cambiado y tu casa ya no te sirve!
Yo creo que se debería nacionalizar el suelo. Es un bien demasiado raro para someterlo a los vaivenes del mercado. Joder, es el único bien que no se deteriora con el tiempo!
Si os fijáis en la imagen, hay un texto que está mal traducido: donde está la clase alta dándose un banquete pone 'nosotros te alimentamos', y debería poner 'nosotros comemos por tí', que es lo que pone el original.
ResponderEliminarLe veo una pequeña pega a nacionalizar la vivienda. Supongo que las familias que se metieron en ellas, podían pagarlas cuando el tipo de interés era del 3%, pero no pueden ahora que supera el 5%. Si el Estado te ayuda a poner la parte que te falta, 200-300 euros al mes, es injusto que se quede con la casa completa. Pero si pretendemos que el Estado compre la casa entera de todo el mundo, le va a faltar dinero.
En todo este asunto deberían pagar los que han ocasionado el problema, a saber, los bancos. En las hipotecas de tipo variable que se concedieron hace unos años, se debería imponer un máximo del 3%, y la diferencia que la sufra el banco. A ver, ellos prestaron el dinero con ese interés, ¿por qué ahora van a tener que sacar tantísimo más si en su momento les pareció bien ganarse sólo el 3%?
Esto no solucionaría la crisis, puesto que seguimos en la misma situación de que no se compran nuevas viviendas, pero al menos no se acentuarán los problemas de personas que tengan que perder los ahorros de su vida invertidos en su vivienda.
En cuanto a viviendas nuevas sin vender, sí creo que es buena idea que el estado compre algunas (a precios favorables, puesto que nadie las compra) y las ponga en alquiler social. Visto lo que se gana un promotor inmobiliario, y ya que no se van a expropiar las viviendas (en España tenemos alergia a esta palabra), con que se le pagara lo justo al promotor para que se fuera sin pérdidas ni ganancias, tendría que darse por contento.